Gracias a los sistemas de recuperación de calor, el diseño enfocado a reducir los puentes térmicos y los aislamientos en la carpintería, este edificio es capaz de minimizar las instalaciones de calefacción y refrigeración. 

El conjunto residencial se ha desarrollado con el objetivo de que cada una de las viviendas constituya una demanda energética mínima y un confort máximo. Todo, con el fin de promover la concienciación medioambiental a través del ahorro energético.

El reto Madrid 0,0 en el que se basa este edificio promovido por Solvia y el colegio de arquitectos de Madrid, se basa en 5 premisas fundamentales:

• Minimizar las pérdidas de calor mediante un correcto aislamiento.
• Asegurar los correctos acabados constructivos para evitar los puentes térmicos.
• Garantizar la estanqueidad al aire.
• Desarrollo de sistemas activos basados en la recuperación de calor.
• El hueco: precisión de la piel como fuente de calefacción

Además, este proyecto cuenta con la etiqueta o certificado ecológico BREEAM.