EL ESTÁNDAR PASSIVHAUS
CONFORT, SALUD Y AHORRO ENERGÉTICO.
Di sí a una mejora en tu calidad de vida.
Cuando hablamos de Passivhaus o casa pasiva, nos referimos al estándar de edificación mundialmente más exigente en materia de eficiencia energética. Este concepto proveniente del alemán, nació en los años 80 en Estados Unidos y se perfeccionó posteriormente alrededor de los 90 en Alemania, gracias a la creación del instituto y la certificación Passivhaus.
Así, las casas pasivas se caracterizan por tener un consumo energético mínimo, principalmente gracias a los siguientes principios:
- El excelente aislamiento térmico.
- La carpintería de altas prestaciones.
- La estanquidad para evitar infiltraciones de aire
- La máxima calidad del aire interior.
- El aprovechamiento del sol para asegurar una mejor climatización.

Todo, con el fin último de reducir el consumo energético alrededor de un 80% en climas severos, como puede ser el caso de Alemania, y del 60% en ambientes mediterráneos, si lo comparamos con el consumo de las construcciones convencionales.
Por otro lado, las viviendas o edificios de consumo de energía casi nulo (NZEB) aprobado por la Directiva Europea 2010/31/UE convierte al estándar Passivhaus en un modelo de edificación respetuoso con el medio ambiente, además de saludable, confortable y sostenible.
Y es que, vivir en una casa pasiva implica minimizar la factura de la luz y maximizar el confort en la vivienda, la cual se regula térmicamente durante todo el año para asegurar la calidez en invierno y la frescura en verano, además de la pureza del aire interior constantemente renovado.
No lo dudes, invierte en tu salud y en la de todos los que de verdad te importan. Apuesta por la eficiencia energética.